VENCEDORES Arriba     Guia

DINÁMICA DEL GRUPO

Un grupo de apoyo no utiliza la dinámica de una clase ni la de un grupo de terapia. Utiliza la dinámica de apoyo mutuo. Por eso tenemos un facilitador en vez de un líder. El facilitador escoge un tema de la recuperación para una reunión, con citas bíblicas y lecturas de Un Día a la Vez en Al-Anon o Valor para Cambiar pertinentes a éste. En la reunión, se hace una lectura y hacemos comentarios acerca de ella. No hablamos de teorías, filosofías ni teologías, sino que compartimos aplicaciones prácticas y experiencias vividas. El propósito no es adquirir más conocimientos, sino que Dios nos cambie.

Por ejemplo, si leemos el Salmo 51 en que David le pide perdón a Dios por su pecado, no hablaremos de los hechos que lo llevaron a este arrepentimiento. Compartiremos experiencias en las cuales hemos sentido la misma culpa, desesperación, e incapacidad frente al pecado, y nuestra dependencia total del Señor.

Las reuniones de VENCEDORES pueden ser muy íntimas. Sentimos la confianza de compartir nuestros sentimientos y así desahogarnos. Cada participante tiene el derecho de sentir lo que sienta y decir lo que se le ocurra decir, aunque a algunos no les parezca. En VENCEDORES, como en otros grupos de los Doce Pasos, tomamos lo que podemos aplicar a nuestras vidas y dejamos lo que no nos sirve, sin juzgar a los demás. Nunca negamos la validez de la experiencia de otro, ni le contradecimos. Sin embargo, estamos en plena libertad de expresar una opinión o experiencia contrastante. Por ejemplo, en vez de decir, "No es cierto," o "No estoy de acuerdo," podemos decir, "A mí me paso _________," o "Estoy aprendiendo __________," o "Interpreto este pasaje así," o "A mí me sirve _________." La diversidad es positiva y nos ayuda a crecer. "Dios nos ha dado diferentes capacidades según lo que La ha querido darle a cada uno." (Romanos 12:6a, Versión Popular). Recordemos que existe una sola autoridad en nuestro grupo: Jesucristo, tal cómo Él manifiesta su amor entre nosotros.

COMO COMUNICAR ACEPTACIÓN

Es necesario que mantengamos un ambiente de aceptación en VENCEDORES. De esta manera sentimos la confianza necesaria para compartir de nuestro interior y recuperarnos. "Cuando una persona siente que es verdaderamente aceptada por otra, tal como es, entonces se siente libre de tomar esa aceptación como punto de partida y empezar a pensar cómo quiere cambiar, cómo quiere crecer, cómo puede ser diferente, cómo podría llegar a ser más de lo que es capaz de ser. La aceptación es como la tierra fértil, que permite que una pequeña semilla llegue a convertirse en la hermosa flor que está latente en ella." [Dr. Thomas Gordon, P.E.T.: Padres Eficaz y Técnicamente Preparados, 37-38] Hay dos técnicas que pueden ayudarnos a facilitar un ambiente de aceptación. Son la forma activa de escuchar y mensajes yo.

La Forma Activa de Escuchar

Podemos comunicar aceptación con gestos, posturas u otros comportamientos. "El no decir nada también puede comunicar con toda claridad aceptación. El silencio, forma pasiva de escuchar, constituye un fuerte mensaje no verbal y puede ser utilizado eficazmente para hacer que una persona se sienta aceptada realmente."[Dr. Thomas Gordon, P.E.T.: Padres Eficaz y Técnicamente Preparados, 43]

Generalmente la forma eficaz para escuchar a un compañero de VENCEDORES es la forma activa de escuchar. El comunicador cuenta un problema y los sentimientos que éste ocasiona. El oyente, después de escuchar, le da un mensaje que refleja el sentimiento del comunicador. El comunicador tiene la oportunidad de negar o afirmar la declaración de reflexión del oyente. Esto lo ayudará a tomar responsabilidad de sus sentimientos, pensamientos y acciones. En realidad el oyente actúa como un espejo para el comunicador. Habiéndose visto en la respuesta del oyente, el comunicador puede aceptar su situación.

EJEMPLO:

Hablan dos compañeras de VENCEDORES.

GUADALUPE: Vicente no me dio mi gasto esta quincena. Nunca cumple conmigo.

JUANITA: Creo que estás un poco enojada con tu marido.

GUADALUPE: ¡Claro que estoy enojada! ¿Cómo no voy a estarlo? Si no me da para la comida, no le voy a preparar nada.

JUANITA: Estás tan enojada que quisieras castigarlo.

GUADALUPE: Sí, es cierto, pero si no le guiso a él, ¿qué de mis hijos? ¿Qué comerán ellos?

JUANITA: Sí, tienes responsabilidades para con ellos.

GUADALUPE: Sí y la verdad es que sigo queriendo a Vicente.

JUANITA: Por supuesto. Pero es difícil no vengarte cuando te sientes sola.

GUADALUPE: Tienes razón. Sin embargo, si busco venganza, también me lastimo a mí misma y a toda mi familia.

En este ejemplo, Juanita no juzga a Guadalupe. La escucha activamente, haciendo comentarios que reflejan su propio entendimiento de los sentimientos de Guadalupe. Juanita modela el amor incondicional de Jesucristo que permite que Guadalupe se acepte a sí misma y su propia realidad. Juanita no da consejos y esto la da a Guadalupe la oportunidad de buscar y encontrar la salida que Dios quiere.

La forma activa de escuchar no es...

Estrategias para escuchar activamente

Estas frases nos ayudan a expresar nuestro interés en y nuestra aceptación de quienes escuchamos.

En los grupos de los Doce Pasos, no damos consejos. Solamente contamos nuestras propias historias. Compartimos nuestras propias luchas, fracasos y éxitos. Además, en grupos de recuperación cristianos como VENCEDORES, tenemos la oportunidad de compartir cómo Cristo está obrando en nuestras vidas y cómo los Doce Pasos facilitan nuestro discipulado cristiano.

Mensajes Yo

En recuperación, nos enfocamos en nosotros mismos. Soy responsable de mis pensamientos, mis sentimientos y mis acciones. Por eso, usamos la técnica de "mensajes yo". Cuando usamos "mensajes tú", acusamos a la otra persona y provocamos una reacción defensiva en ella. Generalmente esto impide que nos oiga. Con "mensajes yo," la otra persona no se siente atacada y no tiene necesidad de defenderse. Por eso, nos puede oír. A través de este tipo de mensaje personal, compartimos nuestra experiencia, fortaleza y esperanza.

Ejemplos de "mensajes tú": Ejemplos de "mensajes yo":

"Me estás molestando."

"Estoy cansado."

"Me haces enojar cuando..."

"Me siento enojado cuando..."

"Hiciste bien."

"Me siento contento al verte tan feliz por lo que lograste."

"¡No hagas eso!" "Me da miedo pensar que puedas hacer eso."
"Debes intentar ____."

"A mí me da resultado hacer _____."

"Tú eres una buena esposa."

"Te amo."

Cuando alguien comparte un problema en una reunión de Vencedores, otros en el grupo pueden responder así: "Me identifico contigo. Me pasó algo parecido. Sentí __________________. Hice _______________. Resultó ___________________."

Así la persona con el problema no se siente forzada. Está en plena libertad de probar la solución dada por el otro o no.

ESCUCHA

Cuando te pido que me escuches
    Y me empiezas a dar consejos
   has hecho lo que te pedí.

Cuando te pido que me escuches
    Y empiezas a decirme por qué no debo de sentirme así,
    Estás pisando mis sentimientos.

Cuando te pido que me escuches
    Y sientes que tienes que hacer algo para resolver mi problema,
    Me has fallado, aunque te parezca extraño.

¡Escucha! Todo lo que pedí fue que me escucharas.
    No que hablaras ni hicieras - sino que me oyeras.
Los consejos son baratos: Por unas monedas puedes
    escoger entre varios en un periódico o una revista.
Y yo puedo hacer por mí solo; tengo recursos.

Cuando haces algo por mí que yo necesito hacer
    por mí mismo, contribuyes al miedo y debilidad que siento.

Sin embargo, cuando aceptas como un simple hecho que siento lo que siento,
    por irracional que parezca, entonces puedo dejar de tratar de convencerte
    y puedo dedicarme a comprender qué está pasando.
    Y cuando se aclare eso, las respuestas son obvias y no necesito consejos.

Los temores ilógicos son entendibles cuando comprendemos lo que está detrás de ellos.

Quizá por eso funciona la oración, a veces, para algunas personas.
    Porque Dios es mudo, y no da consejos y no trata de arreglarlo todo.
    Él sólo escucha y deja que encuentres tu propia solución.

Entonces, escúchame, por favor, y óyeme. Y si quieres hablar,
    espera tu turno un minuto, y te escucharé.

Anónimo